La Vitamina C es una materia superefectiva que se emplea para endurecer las defensas del cuerpo, así como el metabolismo energético, regenerar la piel y prevenir el envejecimiento prematuro. La irrupción de este componente en cosmética fue un verdadero clamor, ya que aporta cosas diferentes, como la protección contra las influencias ambientales nocivas y hace que la piel sea más semejante, además de endurecerla (fortalece). Todos los productos que utilizan Vitamina C, como los serum, cremas y mascarillas faciales, son muy habituales dentro del mercado de la belleza. En este artículo os explicaremos la vitamina C en cosmética.
Ácido ascórbico (forma de Vitamina C)
El ácido ascórbico es la apariencia más famosa y natural que tiene la vitamina C. Es uno de los elementos que se adapta mejor en altas concentraciones, más o menos entre un 15%-20%, para disminuir algún problema de la piel como puede ser granitos y manchas de pigmentación. También se usan otro tipo de formas de la vitamina C, no solo el ácido ascórbico. Unos claros ejemplo son:
- Acetato de retinol
- Ascorbil fosfato de magnesio
- Ascorbil fosfato de sodio
- Ésteres de vitamina C liposolubles
- Palmitato de ascorbilo
- Tetraisopalmitato de ascorbilo
Serum y la vitamina C
La implementación de la vitamina C en un serum se hace de la manera más pura que hay. Al añadir vitamina C pura, se necesita que la formulación del producto tenga un pH ácido, para que así, la piel tenga la capacidad de absorber correctamente el antioxidante y lograr un mayor efecto posible. Aunque, como todo, siempre aparece una parte negativa, y es que en este caso, si el serum contiene una alta concentración de vitamina C, es recomendable que su uso no sea diario, a causa de su efecto sobre renovación celular. Se estima que la concentración que debería tener aproximadamente fuese del 15%.
¿Qué es importante tener en cuenta con los serum?
Como hemos dicho anteriormente en este artículo, es primordial destacar que los serum que contengan una alta concentración de vitamina C, es recomendable que no se apliquen diariamente, ya que su efecto sobre la renovación de la piel puede llegar a causar irritación. Si quieres utilizar alguna crema diariamente, te recomendamos que gastes una que posea una dosis más baja de vitamina C, la cual también proporciona una hidratación intensa.
En el caso de que uses una crema de día, te aconsejamos que busques una que además tenga protección solar, ya que una de las causas de la vitamina C es que la piel sea más vulnerable a la luz solar. Asimismo, una materia como es la vitamina C es obligatorio que se combine con ácidos AHA, puesto que estos afectan muy negativamente la absorción de la vitamina.
Finalmente, otro punto que hay que tener en cuenta es que los serum que poseen vitamina C, deben mantenerse lejos de la luz solar. Además de tenerlos bien cerrados después de utilizarlos, ya que su efecto lo más probable es que se reduzca.